Menú
Ya sabes que en diciembre leímos Un legado de sangre, de S.T. Gibson. La novela se nos presenta como “Un retelling maravillosamente oscuro de la historia de Drácula”. Pero, ¿es así?
Hoy voy a hablarte de lo que nos ha parecido esta novela en el Club de Lectura que llevamos a cabo todos los meses en Telegram y el que este año está dedicado a las “Mujeres escritoras”. Si quieres unirte puedes hacerlo consultando las lecturas conjuntas disponibles y accediendo a los grupos de Telegram según los vayamos abriendo. Además, este año, cada lectura conjunta propuesta viene acompañada de una mini caja literaria para que te hagas con el libro y con unos cuantos complementos 😉
¡Espero verte por allí!
Cuando un misterioso desconocido la salva de las garras de la muerte, Constanta se ve transformada de una campesina medieval a una novia digna de un rey eterno. Pero cuando Drácula atrae a una aristócrata ingeniosa y a un artista famélico hacia su red de pasión y mentiras, Constanta comprende que su amado es capaz de lo peor.
Tras hallar consuelo en los brazos de sus consortes rivales, comenzará a desentrañar los oscuros secretos de su marido. Con la vida de sus seres queridos en juego, Constanta deberá escoger entre su propia libertad y su amor por su marido. Pero los vínculos formados por la sangre solo se pueden romper con la muerte
Comenzamos leyendo una serie de advertencias sobre lo que nos encontraremos durante la lectura. La verdad es que impresiona la lista:
Y, sí, todos estos temas aparecen durante el relato pero, quizá, no de la manera tan cruda como cabría suponer ante unas advertencias previas a la lectura. Es decir, en ningún momento nos ha causado una sensación angustiosa que nos llevase a plantearnos dejar la lectura. De hecho, creo que uno de los alicientes para continuar leyendo era encontrar algo más de “sangre”.
El comienzo es poderoso y la pluma de Gibson nos ha encantado, además de la estructura del texto a modo de diario, con capítulos que apenas eran unas pocas líneas y servían para abrir boca a lo que vendría. También nos pareció que la segunda parte del libro (la dividimos en dos para hacer la LC) flojeó un poquito y nos quedamos con la sensación de que la autora podría haber sacado “más chicha” a uno de los momentos más delicados y álgidos de la novela (para no hacerte spoiler te diremos que es un enfrentamiento entre vampiros/as, solamente).
Las escenas sexuales tampoco son demasiado explícitas, sobre todo si vienes de leer algún Dark Romance o novela erótica. Las sangrientas, tampoco en exceso. La sensación que Un legado de sangre termina transmitiendo es que esta historia de vampiros es la excusa para tratar un tema como es el maltrato dentro de la pareja, cómo hay un miembro dentro de ella más poderoso y cómo el otro (en este caso otroS) termina sintiéndose totalmente anulado e incapaz de escapar de esa vida a la que está “condenado”. En este sentido, la evolución psicológica de Constanta, la protagonista y narradora de la historia, es brutal.
Por otro lado, hablemos de los vampiros y vampiras. En nuestro caso no hemos identificado al vampiro principal de la novela como Drácula sino como cualquier otro vampiro más anciano que va buscando compañía y formar una “familia”. Por lo tanto, la frase “retelling de Drácula” aquí no nos ha encajado -incluso nos ha parecido un poco pretenciosa-, si bien sí es una historia inspirada en el mundo vampírico que creó Stoker, pero sin ninguna relación con la novela del británico (hablamos de estas diferencias en el post Retellings e Historias Inspiradas: Descubriendo sus Diferencias Creativas).
Seguiremos tras la pista de S.T. Gibson porque nos ha gustado mucho su manera de escribir, la historia también nos ha mantenido muy entretenidas y ha sido ideal para leer en poquito tiempo por su longitud y estructura. Así que, si buscas una lectura vampírica ligera, Un legado de sangre puede ser una gran opción para ti.
Si ya la has leído, ¿me dices qué te pareció a ti?
Muchas gracias a mis acompañantes en esta lectura. Fue genial viajar con Constanta por el mundo junto a vosotras. Un beso.
